domingo, 19 de agosto de 2012

¿QUÉ ES LA MUERTE? -extraído de "Cuando el Silencio es Voz" (2003)


Es un amor callado el de la muerte,
un amor silenciando los sentidos.
Un sueño prolongado al Infinito
en un sintiempo ignoto e inmanente.
Es un libro cerrado el de la muerte
que guarda de la vida todo signo.
Un libro inescrutable y prometido
traspasando el umbral de lo existente.
Un rosal olvidado, el de la muerte,
que aromó los instantes ya vividos.
Un resplandor ausente y purpurino
dando paso a una vida diferente.
Pero es amor al fin, el más clemente;
misterio que fue vida en su delirio.
Es justicia después de lo existido
tras un soplo fugaz y aún latente.
Un rencuentro con Dios, eso es la muerte:
total, abrasador, definitivo.
Un rencuentro seguro, no sombrío,
donde solo la paz es permanente.

ROMANCE DE MI NOSTALGIA - extraído de "Cuando el Silencio es Voz" (2003)


Hoy discurre mi nostalgia
desandando los silencios
escondidos en la bruma
inquilina del misterio.
En el alma que se agita
se adivinan los desvelos
circundados por la opaca
dimensión de tierra-cielo.
Mi nostalgia es como el ave
detenida en el espejo
de los ríos infinitos
que navega el pensamiento.
Apresando silogismos
marginados de los sueños,
mi nostalgia lleva un nombre
adherido a un sentimiento.
Noche a noche, por el aire,
van y vienen los recuerdos
de otros días sin acaso,
sin angustias y sin miedos.
Entre risas de un pasado,
en un ángulo completo,
crepitantes de esperanzas,
de la aurora llegan ecos.
Indelebles, dócilmente,
mi nostalgia y el silencio
se derraman en mi almohada
con un tímido aleteo.

miércoles, 1 de agosto de 2012

"Tu distancia" - extraído de "Cuando el silencio es voz" (2003)

Hoy se llama dolor esto que guardo
en el cuenco de níquel de mi alma.
Y del frío abismal de tu silencio
me separan dos rosas y una lápida.


No sé ver más allá del Infinito
donde el Dios del Amor cuida tu ánima.
Sólo sé que en mis días se estremece
la densa soledad que me quebranta.


¿Acaso tu silencio en mi silencio
es prueba del amor que me dejaras?
¿Dónde están la tibieza de tus manos,
tu sonrisa y tu voz y tu mirada?


¿En qué abismos cayeron tus ensueños,
tus afanes, tu lucha esperanzada?
¿Dónde fue la oración de aquella tarde 
que con unción al Padre, tú elevaras?


Abundan las preguntan. No hay respuestas.
Me quema la impotencia de mis lágrimas.
Sólo queda en el hueco de mi vida
el afán de acercarme a tu distancia.


Mención- Academia Iberoamericana de Poesía (Capítulo Montevideo), Montevideo, 2001.

"Dimensión de mi silencio" - extraído de "Cuando el silencio es voz" (2003)

Hay una dimensión en mi silencio
que asciende a las raíces de mi nada.
Se nutre con el eco de tu ausencia
incorpórea, opaca y sin mañana.
En esa dimensión no transitable
solo deambulan sombras desgarradas;
vestigios de una vida intransferible
cuya estela quedó solo en mis lágrimas.
Hoy mi silencio busca tu silencio 
asido en el confín de una esperanza,
tan gris y tan distante, ¡tan vacía!,
que ni siquiera aflora en mi garganta.
Hay una dimensión en mi silencio
que nadie, ¡nadie!, puede imaginarla.
En una dimensión tan intangible
como la inmensa Luz que nos separa.

"Se me durmió una estrella" - extraído de "Cuando el silencio es voz" (2003)

Se me durmió una estrella entre las manos,
una estrella fugaz como la vida
y se deshizo en hilos de silencio
apagando su luz estremecida.


Se me durmió una estrella entre las manos,
mas fue honda, muy honda, su caricia
anegando mi alma con su efluvio
como raudo fulgor en su delicia.


Se me durmió una estrella entre las manos,
dejándome su amor que reivindica
todo el dolor que inunda mis sentidos
en el áspero camino que claudica.


Se me durmió una estrella entre las manos, 
cuando el sol de la tarde se ponía.
En mis pasos quedaron sus fulgores
para alumbrar mi senda día a día.


Se me durmió una estrella entre las manos.
Eras tú esa estrella purpurina.